Consejos para tener un pequeño huerto en tu jardín
En nuestros jardines pueden convivir flores, árboles, fuentes, césped….. y también pequeños huertos. Os listamos algunos consejos para que os iniciéis en el bonito mundo de la horticultura.
1) Que haya luz
La mayoría de los vegetales, especialmente los que dan frutos (tomates, pepinos, calabazas y pimientos, por ejemplo) necesitan mucho sol. Lo ideal sería un lugar con 8 horas de sol directo al día. Con menos luz, se pueden cultivar algunos comestibles, principalmente cultivos frondosos.
2) El suelo lo es todo
El suelo sano y rico es la clave para un huerto exitoso y productivo. Una prueba de suelo te dará una idea de la fertilidad y el pH de tu suelo, y te ofrecerá sugerencias de qué tipos de fertilizantes usar.
3) Mantenlo pequeño
Un jardín de vegetales puede ser de bajo mantenimiento, pero no es de cero mantenimiento. Por lo tanto, hazte un favor y prueba primeramente con una pequeña parcela durante el primer año. Dos o tres metros cuadrados es un tamaño ideal para una huerta inicial y te dará suficiente espacio para cultivar diferentes cultivos. Si deseas empezar con algo aún más pequeño, intenta plantar verduras y hierbas en macetas en una terraza soleada.
4) Escoge tus plantas
Con tu primer huerto, aunque es tentador poder cultivar de todo… por tu propio bien, te sugiero que escojas 4 a 5 tipos de vegetales y los cultives bien. Tratar de amontonar demasiadas plantas en un espacio reducido suele ser problemático y terminarás con una cosecha más pequeña, no más grande. Sin embargo, puedes aumentar el rendimiento mediante la siembra sucesiva. Una vez cosechadas las primeras cosechas, realiza una segunda siembra.
5) Atrae insectos con flores
La mayoría de los insectos son tus amigos. Abejas, mariposas, mariquitas etc. Para atraer a estos insectos a tu jardín – y estimular la polinización de los cultivos – incluye grupos de plantas que atraigan a los insectos.
6) Agua, hierba y alimento
Esto puede parecer uno de los consejos más obvios de la horticultura, pero los nuevos jardineros pueden no saber cuándo o cuánto regar. Los huertos recién sembrados necesitarán riego frecuente, pero la mayoría de los cultivos pueden arreglárselas con 2 o 5 cm de agua por semana. Los cultivos de crecimiento rápido como los rábanos y la lechuga no necesitarán fertilizantes suplementarios si se cultivan en suelo fértil. Los vegetales más a largo plazo como los tomates, la calabaza de invierno y las berenjenas, sin embargo, apreciarán un impulso varias veces durante la temporada de crecimiento. Dales una dosis ocasional de un alimento orgánico soluble en agua para apoyar el crecimiento y fomentar una mayor cosecha.
